Los satélites artificiales de comunicaciones
son un medio muy apto para emitir señales de radio en zonas amplias o
poco desarrolladas, ya que pueden utilizarse como enormes antenas
suspendidas del cielo.
Dado que no hay problema de visión directa se suelen utilizar frecuencias elevadas en el rango de los GHz
que son más inmunes a las interferencias; además, la elevada
direccionalidad de las ondas a estas frecuencias permite "alumbrar"
zonas concretas de la Tierra.
Ventajas de los satélites de comunicación:
Propagación: Que se refiere al conjunto de fenómenos físicos que emiten ondas de radio de un emisor a un receptor, suele ser menor en pérdidas de retardos al enviar la información de una estación a otra, lo cual hace innecesario el uso de antenas y potencias de trasmisión.
Disponibilidad: El objetivo de los satélites es proveer al usuario un servicio en cualquier lugar del planeta, sin necesidad de cables, fibra óptica e infraestructura de cobre, además los precios de
renta de espacio satelital es más estable que los que ofrecen las
compañías telefónicas. Ya que la transmisión por satélite no es
sensitiva a la distancia, y además existe un gran ancho de banda
disponible.
Comunicación:
-Transferencia de información a altas velocidades (Kbps, Mbps).
-Ideal para comunicaciones en puntos distantes y no fácilmente accesibles geográficamente.
-Permite establecer la comunicación entre dos usuarios distantes con la posibilidad de evitar las redes públicas telefónicas.
Cobertura:
En términos generales los satélites tienen una cobertura amplia y muy
segura, por lo tanto la capacidad de trasmitir la información a
grandes distancias no es pobre, esto dependiendo de la altura en la que
este el satélite, por lo general se instalan en lugares donde desde el
punto donde nosotros nos encontramos en muy largo por ejemplo, los
satélites de orbita baja proveen comunicaciones de datos a baja velocidad y no son capaces de manipular voz , señales de video o datos a altas velocidades.
Radiotelescopio
ž En
el año 1937, el ingeniero estadounidense Grote Reber construyó el
primer radiotelescopio, con una antena de 9 metros, en el patio de su
casa.
ž Así se dio comienzo a la “Radioastronomía”, que es la observación del cielo por medio de radiotelescopios.
El
tamaño típico de una antena de radiotelescopio es de 25 metros.
Actualmente hay docenas de radiotelescopios de estas dimensiones
funcionando en observatorios de todo el mundo.
ž Instrumento que sirve como receptor de las ondas de radio provenientes del espacio.
ž Constituido por una simple antena en forma de dipolo, conectada a un sensible aparato de amplificación y registro.
ž Desempeña una función totalmente análoga. Concentra los rayos (ondas de radio) hacia un foco.
ž Las ondas de radio producen sobre la antena débiles corrientes eléctricas, que son después amplificadas.